

Una noche de finales de enero salí a tomar algo.


Estamos en Navidad, época para disfrutar de la familia y evadirte del trabajo, de las tensiones del día a día y de la actualidad aplastante que no cesa.


Hace unos días, una chica, estudiante estadounidense, publicaba en su muro de Facebook un testimonio estremecedor.


"Esto es una naranja", la campaña que explica dónde no deben estar las naranjas Hace una semana, en un pequeño pueblo de Uganda, un grupo de hombres asaltaron a una niña de 12 años mientras sacaba a pasear a su vaca.


Nadia era una estudiante que vivía en el pueblo de Kojo, en Sinjar, al norte de Irak.


"La cultura de la violación, acuñado como concepto en los años setenta, vincula la violación y la violencia sexual a la cultura de una sociedad en la que lo habitual es normalizar, excusar, tolerar e, incluso, perdonar la violación y, al mismo tiempo, culpabilizar a la víctima" - Nuria Varela La cultura de la violación describe un problema social y cultural donde la violación es aceptada y normalizada debido a pensamientos, creencias, comportamientos y actitudes sociales sobre el género, el sexo y la sexualidad; incluye mensajes sociales que ordenan a hombres y mujeres a asumir roles de género predefinidos en relación con el comportamiento sexual.


En un mundo donde la violencia sobre la mujer prima y se manifiesta en todos lados, es absurdo pensar que las violaciones del porno son "un fetiche más" cuando está en las primeras búsquedas en Internet.


Se sigue perpetuando la idea de que las mujeres somos objetos y somos de alguien, como una propiedad y nosotras estamos cansadas de tanta tontería ya.


Lo que empezó como una propuesta sin mayor intención de Cristina Fallarás (@LaFallaras) tras la polémica sentencia de La Manada, acabó siendo toda una revolución virtual.


"Hermana, Yo sí te creo" Lo que hemos visto esta tarde en Madrid y en otras ciudades del territorio nacional ha sido toda una lección de humanidad, de empatía y sororidad por los cuatro costados.


Creo que a todos se nos hiela la sangre cuando vemos en las noticias niñ@s que han sido abusad@s sexualmente, la mayor parte de las veces por miembros de su familia o personas cercanas a ellos, y es mucho más común de lo que parece.


A pesar de no ser una noticia novedosa, la terrorífica historia de “Los ángeles de la muerte” nos sigue impactando.


Tres estudiantes del Instituto Gulliver de Miami, Florida, han inventado un valioso gadget muy útil para las mujeres que salen a discotecas o bares y quieren saber si se les ha echado la tristemente conocida droga de los violadores.